Cuando la inflación es elevada, es práctica común que la gente busque diversas maneras de ahorrar dinero, o al menos de evitar que empeoren las finanzas personales. Una de ellas es guardar el dinero en efectivo ‘bajo el colchón’. Pero quienes la practiquen deben saber en qué casos podrían estar bajo la lupa de Hacienda.
Si bien de buenas a primeras que se puede hacer sin problemas, se debe de tener cuidado con esta acción doméstica. Por ejemplo, el hecho de poseer dinero en efectivo en el hogar implica ciertos peligros o riesgos, los cuales podrían llegar a convertirse en un verdadero problema si la persona no lo mantiene bien guardado y vigilado. Lo bueno es que guardar el dinero en efectivo en el propio domicilio es algo completamente legal, siempre y cuando se declare de forma correcta.
Para realizar este trámite, la clave está en la declaración de la Renta, donde se indica el origen de ese dinero. Así, el portal especializado HelpMyCash explica las consecuencias que tiene guardar el dinero en casa para la Agencia Tributaria.
Declarar el origen del dinero
Lo primero, la Renta está para declarar correctamente la procedencia del capital, independientemente de dónde se almacene. La declaración debe incluir todo el dinero que se haya obtenido. Se debe añadir que la Agencia Tributaria tiene conocimiento de todas las operaciones con efectivo por valor superior a 1.000 euros, así como los movimientos que involucren billetes de 500.
Por tanto, se trata tanto de depósitos como retiradas de dinero en los cajeros (incluyendo esas cantidades que se llevan a casa, una vez transferidas desde la cuenta corriente). Hacienda recibe la ayuda de las entidades bancarias para descubrir estos movimientos “sospechosos”, ya que estas están obligadas a comunicar esas operaciones que tengan lugar bajo sus recursos.
Según el artículo 93 de la Ley General Tributaria, los bancos en España están obligados a “proporcionar a la Administración tributaria toda clase de datos, informes, antecedentes y justificantes con trascendencia tributaria relacionados con el cumplimiento de sus propias obligaciones tributarias o deducidos de sus relaciones económicas, profesionales o financieras con otras personas”.
¿Cuándo nos investiga Hacienda?
Como ya se dijo, Hacienda solo pondrá su lupa sobre aquellas acciones que impliquen movimientos de dinero a su juicio “sospechosos”, como el uso de billetes de 500 euros (que dejaron de emitirse a comienzos de 2019) o el pago en efectivo de más de 1.000 euros.
Dicho esto, el Banco de España explica en su sitio web que el fisco solo decidirá actuar “cuando tenga sospechas de alguna operación delictiva, poniéndose en contacto con la entidad para pedirle más información, y con el usuario si lo considera procedente”.